miércoles, 24 de julio de 2019

Hitobashira


Lo de ser enterrado vivo a parte de dar juego para otras leyendas urbanas, es uno de los miedos mas comunes o por lo menos, lo era en otras épocas  ya que ahora la medicina ha avanzado tanto que lo vemos casi como un imposible.
Pero en la leyenda que os traigo hoy, la cosa no va exactamente de enterrar vivo por confusión, mas bien por sacrificio humano. Si quieres saber mas, coge el pasaporte que nos vamos de nuevo de viaje por Japón.
Durante la construcción del edificio Matsue, los obreros estaban agobiados porque se les derrumbaba el pilar central cada dos por tres así que los constructores decidieron que para estabilizar el edificio, lo mejor seria sacrificar a alguien a los dioses.
Edificio Matsue
Para ello, se eligió a una doncella que bailaba muy bien así que con toda su hermosura, fue sepultada bajo el pilar central del castillo y el edificio se levantó sin problemas pero se cuenta que desde ese instante, es muy normal ver la aparición de una doncella muy hermosa que va danzando por sus estancias.
¿DE DONDE VIENE ESTO?
Pues del emperador Nintoku,el de la foto de arriba, que dio mucho auge a la agricultura, desarrollándola mediante tecnología. Una noche que estaba un poco agobiado porque un río presentaba problemas de desbordamiento pudiendo llevarse por delante a todas las aldeas que estaban a su alrededor y la presa que él estaba construyendo era inestable, tuvo un sueño con un dios que le aconsejó sacrificar a dos personas para calmar al dios que habitaba en ese río.
Castillo Maruoka, otro que dicen que tiene sacrificios
Dicho y hecho,eligió a dos campesinos pobres y al construir la presa, esta no se cayó y duró muchísimos años, dando por entendido que el dios había aceptado el sacrificio o así es como lo cuenta el "Nihonsonkori" textos en chino clásico que recogen la historia de Japón desde el año 681.
Al ver que eso funcionó, se convirtió en una practica popular el enterrar a doncellas o campesinos en los pilares centrales de edificios importantes,aunque a veces eran los propios sumarais los que se ofrecían en sacrificio. Esos edificios aguantaban hasta el dia de hoy pero claro, con fantasma incluido y como curiosidad, decir que esa practica acabó oficialmente en el siglo XVI pero también se aplica a los obreros que hacían edificios en régimen de esclavitud y debido a esas condiciones, caían muertos en la obra siendo sepultados en la misma como si no hubiese pasado nada.A saber entonces cuantos edificios hay con alguien en los cimientos.
¿Conocías estas leyendas? 


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