domingo, 2 de octubre de 2022

El monstruo de Florencia



Cuando uno piensa en Italia, así como tenga la cabeza, le vienen a la mente varias imágenes que tenemos gracias a la cultura pop como pueden ser la Fontana di Trevi al haber visto "Vacaciones en Roma" o "La Dolce Vita" ,en mi caso alguna escena que he recreado en mi cabeza de los libros de Andrea Camileri, la canción  "Sapore di sale" de Gino Paoli, Patty Pravo que me encanta cantando "La Bambola", la peli de "La vida es bella", Maneskin cantando en Eurovisión que me tragué yo esa gala entera y estaba con el corazón dividido entre ellos y Finlandia pero a lo que voy, que nunca te viene a la mente un asesinato. 
Así que hoy, os voy a contar la historia de un monstruo de Florencia, a ver qué os parece...
Pascualle Gentilcore y Stefania Petinni
Estamos en 1974, en el Borgo de San Lorenzo al norte de Florencia. El 15 de septiembre, se rompe la tranquilidad del lugar al aparecer muerto en su coche Pascuale Gentilcore de 19 años y su novia Stefania Pettini. A los dos se los había tiroteado con una Beretta con un defecto en el percutor que dejaba una marca en todas las balas, usando las Winchester del calibre 22 serie H , pero mientras que él estaba en su coche aun, su novia apareció fuera del mismo, con sus brazos en cruz, las piernas abiertas y con 97 puñaladas a  parte de los disparos. Su bolso y sus cosas estaban desparramadas a su alrededor.
El asesino había hecho un diseño con los cortes alrededor del pecho y la vagina, donde encontraron encajada una rama de vid. La cosa se atascó y la policía fue incapaz de encontrar a un culpable por este asesinato doble ya que no había pruebas, solo pudieron identificar la pistola y que a ella la habían apuñalado con un cuchillo de submarinismo.
Saltamos entonces en el tiempo, misma zona aproximadamente. El 6 de junio de 1981, en la Via dell Árrigo, aparecen los cuerpos de otra pareja: Giovani Foggi y Carmela di Nuccio, exactamente igual que el caso del 74, él dentro del coche, ella fuera, con su bolso y cosas tiradas a su alrededor, los dos tiroteados pero con la diferencia de que ella no tenia nada dentro de la vagina ya que esta vez, se la habían extirpado quirúrgicamente. Si se puede hablar de suerte, la policía encuentra que han sido disparados con el mismo tipo de arma y que habían usado el mismo tipo de cuchillo para apuñalar a Carmela y extirparle la vagina. 
Carmela de Nuccio y Giovanni Foggi
El 6 octubre de ese mismo año, la policía recibe la llamada de una pareja que iba a los Campos de Bartoline a hacer exactamente lo mismo que las victimas que aparecieron: la pareja formada por Stefano Baldi y Susana Cambi. Imaginar a los que encontraron los cadaveres ir a darse una alegría para el cuerpo como pareja y encontrarte la escenografía que montaba el Monstruo de Florencia, no hay cuerno de unicornio que ayude en lo que queda. 
Ahora que lo positivo fue que ésta pareja, vio a una persona salir en un Alfa Romeo de color rojo de la zona de los asesinatos y aunque en un principio parecía una pista prometedora, se acabó quedando en nada. El 19 de junio de 1982, aparece en una cuneta de Montespertoli un coche encajado que pertenecía a Paolo Mainardi en el que dentro estaba su pareja Antonella Migliorini, los dos cosidos a tiros con la misma pistola pero al parecer, cuando la pareja estaba dentro del coche y el asesino los sorprendió, a Paolo le dio tiempo dar marcha atrás para intentar salir pero el asesino debió de acertar el tiro y el coche acabó encajado en la cuneta por lo que era imposible sacar a Antonella del coche. De la rabia, reventó los faros del coche a tiros y las llaves aparecieron arrancadas a cien metros del coche.
De los primeros libros
Otro cambio que hubo en otra escena, fue en Giogoli, el 9 de septiembre de 1983. El asesino se fue a otra zona de enamorados cuando se encontró a una pareja dentro del coche haciendo el amor; les pegó varios tiros y cuando se cercioró de que estaban muertos, sacó de la melena a la chica del coche para darse cuenta de que era un hombre ya que las victimas eran la pareja alemana Horst Meyer y Uwe Rush. La Beretta seguía siendo el mismo arma utilizada. 
El 29 de julio de 1984, de nuevo otro asesinato. Esta vez la pareja formada por Claudio Stefanacci y Pia Rontini, los dos acribillados a tiros y ella con mas de 100 puñaladas, la vagina extirpada y una novedad mas, quien sabe si fue por la rabia de que los dos asesinatos anteriores no llegaron a termino, la amputaron el pecho izquierdo.
El 8 de septiembre del 85, mi año por cierto, aparecen los cadáveres de Nadine Mauriot y Jean Michel Kravechvilj. Habían acampado en la zona de Scopeti, siendo el único crimen que no hubo coche de por medio. El asesino rajó la tienda con el cuchillo de submarinismo y acribilló a la pareja a tiros pero Jean Michel encontró fuerzas para salir corriendo aunque de poco le sirvió porque el asesino le dio alcance y le degolló. A Nadine la apuñaló y también la extirpó la vagina y el pecho izquierdo.
UN POCO DE ORDEN POR FAVOR: EMPEZAMOS CON LA PISTA SARDA.
Tras los crímenes del 82, un avispado sargento llamado Francesco Fiore, recordó que la policía estuvo investigando en 1968 el caso de asesinato de Barbara Locci y Antonio Lo Bianco. Él estaba destinado en Signa donde todo sucedió y aunque recordaba el caso, 14 años después algunos detalles bailaban en su mente por lo que se fue a comprobar si lo que él recordaba era cierto.
El 23 de agosto de 1968, Barbara Locci fue asesinada junto su amante, el albañil Antonio Lo Bianco mientras estaban dándole al asunto en el coche de él. El autor del crimen fue el marido de Barbara, Stefano Mele junto con algunos amigos y compinches suyos en otros crímenes, Salvatore y Francesco Vinci, siendo el único testigo de éste asesinato el hijo de Barbara y de Stefano, el pequeño Nicola Mele.
Como decía, vamos a poner orden comenzando por la familia Vinci: provenían de Villacidro en Cerdeña siendo Giovanni, Salvatore y Stefano, teniendo cada uno un pasado peor en su lugar de origen.
Giovanni era el menor y gustaba de violar a su hermana cuando le daba la gana, Francesco era violento y era mejor alejarse de él ya que tenia una gran habilidad con los cuchillos, Salvatore era el mediano, forzó a una adolescente llamada Barbarina con la que al final se acabó casando tras tener al pequeño Antonio Vinci. Era conocido por todo el pueblo que la maltrataba y cuando la muchacha apareció extrañamente suicidada tras inhalar una bombona de gas, el pueblo se echó encima de Salvatore y Francesco que eran los únicos que quedaban allí viviendo por lo que decidieron seguir los pasos de Giovanni que vivía de realquilado en casa de los Mele en la Toscana.
El matrimonio de los Mele fue mas por conveniencia que otra cosa ya que Barbara no quería haberse casado con Stefano, siéndole infiel cada vez que tenia ocasión conociendo muy en profundidad a los hermanos Vinci hasta que se fue con Lo Bianco. Mele estaba harto de ver su honor pisoteado así que decidió tenderla una emboscada para que confesase pero algo se fue de las manos ya que su mujer y amante aparecieron acribillados a tiros, rodeados de pistas que apuntaban a un grupo de hombres y de hecho, el pequeño Nicola dijo que su padre y unos amigos habían estado en el momento del crimen.
Salvatore Vinci
Stefano en un primer momento dijo que fue con Salvatore y con Francesco a hacerle la emboscada a su mujer pero que se vinieron arriba, Salvatore los acribilló y que luego le dio la pistola para que rematase a su mujer. Le hicieron la prueba de parafina, lo que hizo que se descubriese que había pólvora en sus manos pero tenia tanto miedo a los Vinci que al final se declaró autor del doble homicidio y dijo que la pistola usada la había tirado a una acequia, por lo que fue condenado a 14 años, lo que le excluía de ser el monstruo.
Pero nuestro querido amigo Francesco Fiore, comprobó que lo que él recordaba, era correcto: el arma usada en estos crímenes fue una Beretta de calibre 22 con balas Winchester serie H que tenían la particularidad de que dejaban una marca en la base del cartucho por un defecto en el percutor. 
Fiore no estaba seguro, pero comprobó que el arma de este crimen nunca apareció y tras unas comprobaciones, se averiguó que la Beretta había sido la misma en todos los crímenes, por lo que quizás se acotaría algo o se liaría un poco mas ya que como dije, Mele no podía ser el monstruo por haber pasado tiempo en la cárcel, por lo que alguno de los hermanos Vinci o sus descendientes, tenia que serlo.
En primavera de 1974, el mismo año en el que comenzaron los crímenes, Salvatore se presenta en la policía a denunciar a su hijo Antonio ya que al parecer ha entrado a robar en su casa unas cuantas cosas, entre las que estaba una caja. Con el tiempo, se pensó que en dicha caja estaba la pistola y los cartuchos, siendo una forma de Salvatore de protegerse las espaldas; como curiosidad, decir que a finales de 1974 y 1980, Antonio se ausentó de Florencia ya que se fue a vivir con su tía, casándose al comenzar la década y divorciándose en 1985 ya que al parecer no se consumó el matrimonio.
Pietro Pacciani
La principal pega que se pone a la teoría de que éste fuera el autor, es que en 1974, solo tenia 15 años pero también hay que ver del entorno en el que sale y no solo eso, sino que cuando se supone su madre se suicidó inhalando el gas, él al parecer estaba delante siendo testigo del suicidio o no de su madre. A saber qué vería de niño.
Además, se comprobó que tanto Francesco como Antonio podían haber estado en las inmediaciones de los crímenes gracias a los testimonios de los testigos, pero cuando Stefano Mele cumplió condena y salió de la cárcel, otra línea de investigación apuntaba a su hermano Giovanni Mele y a su cuñado Piero Muchiarini como posibles propietarios de la pistola y que también tenían su fama como delincuentes menores.
El caso es que detienen a Francesco por encontrar su coche cerca de la escena del crimen de Montespertoli escondido debajo de unos matojos, a Antonio por posesión ilícita de armas y a Giovanni junto a Piero por sospechosos. Enfrentan a Francesco con Antonio pero todo les sale mal teniendo que liberar a éste ultimo pero por si fuera poco, mientras Francesco, Giovanni y Piero están en la cárcel, se comete el crimen del año 84 y a la fiscal encargada del caso, le llega una carta anónima hecha con recortes de revista con un trozo del pecho amputado de Pia avisándola que si seguía investigando, así acabaría ella por lo que se retira de la investigación.
Como no tienen nada contra ninguno de los tres y pasando de que Antonio esté fuera, deciden apelar a la colaboración ciudadana ya que no hay nada que usar en contra de los Vinci y las pruebas forenses en los crímenes, no estaban bien recogidas como para hacer comparaciones con algún potencial autor.
LINEA NUMERO 2, LOS COMPAÑEROS DE MERIENDA
Giancarlo Lotti
Lo primero una explicación: un compañero de meriendas en el argot italiano, al parecer significa un compañero de tropelías o lo que ahora ponen los modernos en las redes, un partner in crime.
Rugero Peruni fue nombrado como jefe de policía a finales de los 80 y decidió aplicar datos estadísticos para hacerse una lista de sospechosos un poco mas solida y él que más puntos tenia, era  Pietro Pacciani al que muchos testigos oculares, situaban cerca del lugar de los crímenes en las mismas fechas. 
Pietro era de esos hombres de los que es mejor huir ya que fue detenido en 1951 por asesinar al amante de su prometida disparándole y apuñalándole casi 20 veces, después a ella la violó en repetidas ocasiones siendo condenado por esto a 13 años de prisión pero fue detenido en 1987 por malos tratos y acoso sexual a sus propias hijas.
La policía le investigó pero no encontró nada hasta que consiguió una orden de registro de su casa en 92 una bala oxidada marca Winchester serie H pero ahí se lio un poco la cosa, ya que él había salido en el 91 tras cumplir condena y proclamaba su inocencia ante este caso ya que el periodista Mario Spezi consiguió que el jefe de carabineros reconociera que quizás esa prueba había sido colocada en su casa por presión de la opinión publica.
Mario Vanni
Fue absuelto por falta de pruebas pero se detuvo a dos amigos suyos que telita marinera, un candil apagao tiene mas luces que ellos: Giancarlo Lotti y Mario Vanni que habían sido reconocidos por testigos y que hasta ellos mismos declararon haber ayudado a Pacciani en algún asunto diciendo todo el rato que eran compañeros de merienda.
En 1994, Pacciani fue condenado a varias cadenas perpetuas ya que el juicio había sido televisado y seguido por la opinión publica pero la misma opinó que esto era una forma de dar carpetazo al asunto ya que el monstruo llevaba sin matar desde el 85 y sus hijas a pesar de que declararon todo lo sórdido que era su padre, no recordaban nada que le vinculase con el tema del Monstruo. Ni siquiera que su pistola fuese una Beretta.
En la apelación de 1996, el fiscal se dio cuenta de que las pruebas contra Pacciani no valían para nada por lo que salió en libertad mientras que sus compañeros, fueron condenados en el 97 por haber matado a 14 personas ya que trabajaban para una secta satánica que les pedía órganos de mujeres. Da igual que se averiguase que los testigos eran prostitutas, drogadictos o gente que tenia algo en contra de éstos dos y que sus exámenes psicológicos diesen a entender que eran deficientes mentales ¿Cómo se te queda el cuerpo? 
De los últimos libros 
El caso es que en 2002, Lotti salió de la cárcel al tener un cáncer de hígado muy avanzado por el que falleció semanas después y Mario Vanni salió también en 2004 por motivos de salud para ir a parar a una residencia de ancianos donde estuvo viviendo hasta que murió en 2009.
Pietro Pacciani había muerto en 1998 a los 72 años de una forma muy rara ya que apareció suicidado con los pantalones bajados y su camisa anudada alrededor del cuello. Podía haber sido una muerte a lo Carradine pero la autopsia determinó que le habían estado envenenando poco a poco con su medicación para la diabetes que padecía y sus problemas cardiacos. Se llevó tanta paz como dejó y tampoco es que se volcasen en investigar quien lo hizo.
Por su parte, el otro hilo del caso, Antonio, fue entrevistado por Mario Spezi y Douglas Preston para su libro a los que insistió en su inocencia en los asesinatos, en el robo de la pistola pero se le escapó que tenia un cuchillo de submarinismo. 
A día de hoy, es un crimen que sigue sin resolver ya que muchos de sus investigadores fueron a colgarse una medalla y se olvidaron de las victimas que son las mas importantes ¿Quién crees que fue?¿quizá una tercera linea no investigada?




14 comentarios:

  1. Vaya historia, es de las que me gustan a mí. Un beso enorme y feliz semana.

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    1. Me alegro que te gustase Rocío, alguna creencia sobre quien pudo ser?
      Feliz semana a ti también! Un besazo!

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  2. El Demiurgo de Hurlingham2 de octubre de 2022, 23:21

    Esas historias que contás, con talento narrrativo, me producen una doble sensación. Indignación, pensar en tantas mujeres, sin duda bellas, tan cruelmente asesinadas.
    Y el potencial como ficción. Como una película a lo Dario Argento.
    En la peĺícula se incluiría lo de la fiscal intimidada. Quien tal vez seríabrescatada a último momento.

    Diría que fue una cuestión de familia de los Vinci. Que Antonio siguió con.esas costumbres. Que surgieron con el que mató a su involutaria esposa y su amante.

    Pacciani pudo haber sido envenenado y estrangulado por venganza, de parte de alguna pariente de alguna mujer asesinada o de algunos de sus amantes.

    Muy bien contado.

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    1. Pacciani creo que fue envenenado por aquellas que le acusaron y como digo, tanta paz se llevase como la que dejó que no fue casi nada.
      En cuanto al monstruo, apoyo tu versión de la familia Vinci y si, creo que una peli a lo argento sería muy buena para ilustrar este caso.
      Cada visión del caso, da para para otra trilogía de las tres madres.
      Un besazo Demi!

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  3. Recuerdo el caso,
    salió en el canal
    Dmax o Dkiss ,
    creo, recuerdo
    a Mario Spezi
    y a Ruggero
    Peruggini ,todo
    apuntaba a
    Francesco
    Calamandrei

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    1. Me lo anoto para buscarlo en la tele que fijo lo han tenido que reponer.
      Gracias Orlando!

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  4. En Argentina hubo algunos casos parecidos, pero por algo tenemos en nuestro gen sangre italiana jajaja. El libro lo voy a buscar ;) muy buena entrada More.

    Un besote desde Plegarias en la Noche.

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    1. La verdad es que el acento argentino, el italiano y el gallego siempre me suenan como si estuviesen cantando. Es precioso de escuchar.
      Busca el de Mario Spezi con Douglas Preston que es más reciente.
      Un besazo Tiff

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  5. estos asesinatos parecen una mezcla entre la de un solo autor y lo hecho por un imitador. el problema es que hay mucho sospechoso involucrado.

    besos.

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    1. Yo me inclino más por los Vinci que por los compañeros de meriendas. Además que hubo también mucho fallo policial pero eso da para otra entrada.
      Un bedazo Draco!

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  6. Uy que crimines. A pesar de todo lo que hizo me dio pena su final. Te mando un beso.

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    1. Un besazo J. P, veo que has vuelto al look clásico!
      Un besazo

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  7. Yo me quedo sin aliento para hacer un comentario sobre esta historia.
    Nadie estamos libres de que nos ocurran cosas tan espeluznantes.
    Hay crímenes que nunca serán esclarecidos.
    Es difícil encontrar a l@s culpables.
    Te mando un saludo

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    1. Son tantas las realidades que nos rodean, que a veces rozamos las peores sin ser conscientes. Nadie está libre de que nos pase algo y como tú, creo que no se sabrá exactamente quién fue. Quizás alguien confiese en sus últimos alientos aunque lo dudo.
      Un besito Beatriz!

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