El OVNI Cash-Landrum

No se en vuestro país, pero en España lo de las cenas de navidad es por demás. Siempre te sale alguna a la que no puedes faltar por compromiso pero que realmente no te apetece nada de nada el moverte de tu casa. No digamos ya lo de aparcar, que eso da para otro episodio.

Ahora, que os pongo en la situación de que aprovecháis que tenéis vacaciones un día entre diario cuando la gente aun esta trabajando, los sitios están mas vacíos y puedes ir a cenar con mas calma. Imagina que vas a cenar con quien realmente quieres estar, te lo estas pasando bien y al volver a casa, te encuentras un diamante sobrevolando los cielos que está esculpiendo fuego...

El 29 de diciembre de 1980,Vicky Landrum volvía con su nieto de siete años Colby en el coche de su amiga Betty Cash a su casa en la localidad texana de Dayton tras haber ido a cenar fuera. El viaje transcurría normal siendo un trayecto que habían hecho en varias ocasiones, pero lo que no esperaban era que su vida cambiaria al pasar por un tramo estrecho de dos carriles en medio de una densa arboleda.

Sobre las 9 de la noche, los tres vieron una especie de diamante gigantesco encima de la carretera que despedía fuego de su parte inferior. Lo cierto es que unos kilómetros atrás, habían visto el objeto mas lejos muy brillante pero al encontrarse cerca del aeropuerto de Houston, pensaron que quizás era un avión que estaba efectuando las maniobras para aterrizar por lo que los tres se sorprendieron al encontrárselo de frente y que efectivamente, estaba haciendo la maniobra de aterrizar pero mas bien parecía que quería acercarse al coche lo máximo posible.

Vicky pidió a Betty que frenase ya que el fuego que despedía eso que estuviesen viendo podía quemarlas, notando dentro del coche que la temperatura estaba subiendo pero aun así, las dos salieron del coche dejando a Colby dentro que estaba muy asustado; las dos notaron muchísimo calor en la piel y Vicky, notando que su nieto se moría de miedo, se volvió a meter en el vehículo pero Betty quedó en un estado mezclado de fascinación con terror, sin mover ni un musculo mirando fijamente al objeto que tenia delante.

Betty dijo que el objeto era de un color plata mate y que el fuego que emanaba era similar al de un propulsor. Cuando salió de su estado, logró volver al coche pero se quemó las manos con la carrocería y aquí viene algo de lo que no hay pruebas pero que siempre se cuenta en este caso: cuando Vicky se metió en el coche de nuevo, se quemó la mano al tocar el salpicadero que había quedado blando por las altas temperaturas, dejando su huella durante varias semanas pero al no haber foto, nunca se pudo presentar como prueba pese a que hubo varios testigos que lo vieron.

Betty se quemó con la puerta y con el volante pero consiguió arrancar el coche mientras los tres veían como unos helicópteros negros similares a los de las fuerzas armadas de Estados Unidos, rodeaban al objeto llegando a contar unos 23 pero la verdad es que ninguno andaba para hacer matemáticas ya que los efectos secundarios del calor, comenzaban a manifestarse.

Los tres notaron como su temperatura corporal comenzaba a subir siendo la que peor parte se llevó Betty por haber estado mas expuesta aunque en un principio, parecía que estaba mejor; esa noche los tres sufrieron los mismos síntomas que una persona cuando padece una insolación aguda. El 3 de enero, Betty tuvo que ingresar en el hospital ya que a penas podía andar por las ampollas que habían salido por todo su cuerpo, su pelo se caía y estaba perdiendo piel. Estuvo ingresada doce días aunque al poco tuvo que volver por otros quince días mas, acompañada de Vicky y Colby, ya que a ella también se le había caído el pelo y los dos tenían quemaduras en la piel aunque en menor grado que Betty.

Vicky al temer que los tres podían tener algo peor, comenzó a llamar por teléfono a varias agencias federales e incluso a la misma NASA donde habló con John Schuessler que investigó el caso personalmente, examinando el coche donde fueron los tres con un contador Geiger en 1981 que no encontró rastros de radiactividad y además, no contaba con informes previos de la salud de los tres testigos para hacer comparaciones aunque a principios de los 90, el medico Brian McCelland, dijo que era un caso de libro de envenenamiento por radiación aunque debido a que las dos vivieron varios años mas después del incidente, sospechaba que lo que entró en contacto con su piel, fue algo en aerosol.

Betty finalmente contactó con un abogado cansada de no tener explicaciones por parte del ejercito de lo que sucedió aquella noche y habiendo desarrollado un cáncer entre otros problemas de salud por los que tuvo que cerrar todas sus empresas al no poder hacerse cargo y demandó al gobierno por una indemnización como la habían aconsejado el personal de la Base Aérea de Bergstrom que interrogó a los tres por este caso durante bastante tiempo. Unos 20 millones de dólares a repartir entre los tres.

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Como imaginareis, la investigación se llevó a cabo y estuvo mas tiempo dando vueltas por los juzgados que siendo efectiva pero tuvo bastante publicidad, cosa que benefició a Betty ya que los testigos que salían, coincidían en haber visto al objeto o a los helicópteros por la zona reforzando el relato de los tres pero como imaginareis, la demanda quedó desestimada cuando el teniente coronel George Starran se encargó de la investigación a favor de la Fuerza Aérea, que pese a que encontró fiables a todos los testigos, concluyó que el objeto era falso y que los helicópteros militares jamás sobrevoló la zona aquella noche. Nunca se dio explicación a qué pasó.

Betty falleció justamente 18 años después de su avistamiento, el 29 de diciembre de 1998 tras sufrir un derrame cerebral fulminante con 61 años. Vicky en cambio lo hizo en 1997 y si bien sus problemas de salud no fueron tan fuertes como los de Betty, según Colby, los arrastró durante toda su vida llegando a tener unas cataratas que la dejaron prácticamente ciega poco antes de morir.

Colby es el único que no tuvo efectos secundarios y que con 36 años, llegó a salir en algún programa sobre OVNIS en Estados Unidos en 2009, contando su experiencia y como el gobierno pasó de dar ninguna explicación cuando eran muchos los testigos que aquella noche ya no solo vieron al objeto sino los helicópteros. De hecho, cuenta una anécdota que le sucedió con su abuela ya que en abril de 1981, Vicky le llevó a una exhibición aérea gratuita que se estaba haciendo en la ciudad pero él no reaccionó bien por el recuerdo que tenia de aquella noche así que Vicky le preguntó si quería subir al helicóptero para ir superando sus miedos, cosa que Colby aceptó.

Compraron el billete, esperaron la cola y se subieron al helicóptero donde Vicky comenzó a hablar con el piloto y salió el tema de los OVNIS; ahora que lo que no se esperaban, fue que el piloto empezó a contar que había sido uno de los que pilotaba uno de los helicópteros que vieron aquella noche y mucho menos, que cuando Vicky le dijo que ella había visto el objeto de primera mano junto con los helicópteros y que desde entonces arrastraba grandes problemas de salud, el piloto aterrizó y les hizo bajar del helicóptero de malas maneras. Nunca dieron con él para investigar en el juicio pero años después, algunos investigadores lo encontraron y él nunca confirmó su participación.

Hay muchos detractores de esta historia y otros que lo creen a pies juntillas. La razón que usan los que no creen en este suceso, es que nunca se supo como estaba la salud de los tres implicados antes del encuentro y los que creen que sucedió el avistamiento, en los testigos que iban desde camioneros, trabajadores de petroleros y policías. Además, William J Birnes, escritor relacionado con el asunto OVNI con columna en el New York Times que también ha tenido sus luces y sombras, encontró un informe desclasificado escrito por el propio Starran que llevó la investigación donde reconocía que los helicópteros sobrevolaron la zona aquella noche. 

¿Conocías este caso? ¿OVNI, experimento del gobierno, sugestión? ¿Qué opinas?