Desaparecido en La Mussara

Si os digo la verdad, no sabia muy bien donde encajar esta entrada, si en desaparecidos o en leyendas. 

Pensaras, Morella, de las dos neuronas que te quedan una se te ha declarado en huelga, pero no, lo que sucede es que el contexto de esta desaparición es cuanto menos curiosa por el entorno donde se produjo así que hoy os contaré una desaparición y otro dia, la historia del pueblo donde desapareció así que si quieres saber mas...

Enrique Martinez Ortiz salió el 16 de octubre de 1991 con sus amigos a recoger setas y espárragos en el bosque de la Mussara, era algo que habian hecho mas veces y lo que hacían normalmente para situarse, era ir a distancia de tal forma que entre ellos no se veían pero iban todo el rato hablando  para tenerse localizados.

Pasados unos minutos, no escuchaban a Enrique por lo que comenzaron a buscarle por los alrededores encontrando su cesta con una única seta. A pesar de que la Guardia Civil y los bomberos peinaron la zona,no encontraron a Enrique y a dia de hoy continua desaparecido.

Lo inquietante es que esa zona ha sufrido denuncias por desaparición y también, hay personas de esas desaparecidas que luego reaparecen con vacíos en la memoria, como un alférez que se fue para la Mussara con una amiga y al regresar al campamento militar, descubrió que en lugar de haber estado fuera dos horas como el pensaba, estuvo doce y hasta habian activado una batida para intentar encontrarle o un ingeniero alemán que trabajaba en Vandellosa, que se fue a pasear por la zona volviendo tres horas después sin recordar absolutamente nada.

Pero lo inquietante viene con la declaración de uno de los amigos de Enrique tiempo después. Cuando la policía determinó en enero de 1992 que Enrique no se había marchado voluntariamente ya que encontraron su coche tal y como él lo había dejado, incluida una medicina para una enfermedad que tenia que le impedía andar durante muchas horas y descartar que había sido victima de algún animal al no encontrar restos, levantaron el dispositivo de búsqueda.

Entonces, los amigos de Enrique decidieron hacer batidas por su cuenta al conocerse bien la zona y uno de esos dias, cansados de tanto buscar durante todo el dia fueron a las ruinas del pueblo a descansar un rato antes de marchar a casa. Cuando llegó la medianoche, oyeron cascos de caballo en la zona de la iglesia y al mirar comprobaron que habia unas figuras que llevaban una especie de habito largo de color oscuro y capucha puesta que deambulaban por la zona y se unían a otras figuras que estaban dentro de la iglesia pero lo mas inquietante es que flotaban. 

A pesar de que intentaron hablar con dichas figuras, les ignoraron por completo y desaparecieron pasados unos minutos.Digo yo, que menudo valor tuvieron,que yo veo eso a la medianoche y creo que llego a Salou en cinco minutos de lo que me lío a correr.

El caso es que uno de estos amigos denunció los hechos al titular del juzgado numero 4 de Tarragona que no tuvieron en cuenta a pesar de que les dejó un poco descolocados.

La desaparición fue archivada hace tiempo a pesar de que era de las denominadas "desapariciones inquietantes" ,esperando aun la familia y amigos de Enrique alguna respuesta tanto a su desaparición como a lo que algunos vieron aquella noche de enero de 1992.