Esto si que es una calle curiosa, no me digáis que no. Vamos con el bono de transportes a darnos un paseito por Chueca, te invito a comer en el Bazar, ¡venga!
Cuenta la leyenda que en la epoca medieval, dos hombres se acercaron al convento de San Francisco a buscar a un cura para auxiliar a un moribundo; el sacerdote accedió pero se hizo acompañar de un lego (no, el muñequete no, los hermanos legos eran los que se ocupaban de las cosas practicas del convento como la gestión de los monasterios para que los curas pudieran dedicarse al estudio y la oración mas tranquilamente) y éste tampoco se fiaba de los dos hombres así que decidió guardarse una espada bajo la capa,
Como el lego se temía, después de andar un rato largo llegaron a las afueras de la villa de Madrid donde apresaron a los dos,al lego le ataron y al cura le vendaron los ojos llevándole a una casa donde había una mujer y un bebe recién nacido, ordenandole que confesase a la mujer y bautizara al niño ya que los dos iban a morir.
El sacerdote se disponía a ello mientras el lego se desataba e iba en búsqueda del sacerdote. Mientras estaba buscando, oyó un grito de mujer que decía "¡valgame dios!" y siguiendo esa dirección, encontró en un barranco a los dos hombres que le habían apresado junto al cura queriendo matar a la mujer de la cabaña. Gracias a la espada oculta, pudo parar el ataque y los tres juntos volvían al convento cuando la mujer, que iba con el bebe en brazos, les contó que era amante de los dos hombres pero que el hijo había nacido de la relación de un tercero.
¿Adivináis ahora quien exclamó la frase de valgame Dios?
Con el tiempo,la gente al conocer la leyenda, dio nombre al barranco con esa expresión, que ahora es una callecita un poco angosta que pertenece al barrio de Chueca de Madrid.
También la frase cambio de significado pasando de ser una llamada de socorro a significar "que barbaridad"y dado al escaso aburrimiento de la mujer, no era para menos.
Por si te apetece pasear...
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